Si eres de las personas que le agrada utilizar fajas moldeadoras es importante que no la utilices de forma frecuente, sino ocasionalmente. A menos que tu médico sea quien te lo requiera, ya que estas prendas con son diseñadas para usarlas diariamente.
A continuación te presentamos 5 riesgos que tienes que tener en cuenta acerca del uso de fajas moldeadoras:
Esto puede provocar reflujo y acidez. No es un daño permanente, pero puede provocar incluso que digieras la comida más lento.
Debido a que oprime las venas de los muslos, puede generar dolor, hormigueo e incluso pérdida de la sensibilidad en las piernas. A diferencia del primer riesgo, esto puede transformarse en algo persistente.
Generalmente, quienes utilizan fajas lo hacen buscando mejorar su postura, sin embargo es importante que este esfuerzo venga de nosotros mismos ya que si lo buscamos a través de las fajas conforme pase el tiempo lo único que lograremos es debilitar nuestros músculos, resultando contraproducente.
El uso de las fajas también puede ocasionar infecciones en el área del bikini, por el almacenamiento de calor y humedad que a su vez provocan la aparición de bacterias, que quedarás atrapadas en los folículos de nuestra piel, suscitando infecciones vaginales.
Si a pesar de lo anterior quieres adquirir una faja es importante elegir tu talla adecuada, no debe quedar muy ajustada, recuerda que no necesitas sentir que te asfixias.
** El contenido de esta página es meramente informativo y educativo, por lo que no sustituye el diagnóstico ni la supervisión de un médico, ni ofrece tratamiento alguno. Consulta a tu médico antes de realizarte algún estudio.
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